Francisco ha dado a entender que la Iglesia Católica podría relajar la prohibición de la anticoncepción en mujeres con riesgo de contraer el virus Zika.
El pontífice insistió en que el aborto sigue siendo un delito, pero dijo que evitar el embarazo fue "no es un mal absoluto".
Sus comentarios se produjeron en respuesta a una pregunta sobre la mejor manera de abordar el brote Zika en toda América Latina.
El virus se ha relacionado con los defectos de nacimiento en los bebés microcefalia, que pueden causar problemas de desarrollo.
"No hay que confundir el mal consiste en evitar un embarazo con el aborto," Francisco dijo a los periodistas en un vuelo de regreso a casa después de una visita a México.
"Aborto no es un problema teológico. Es un problema humano, médico. Una persona muere para salvar a otro. Es malo en sí mismo, no es un mal religiosa, es un mal humano", dijo.
"Cómo evitar un embarazo no es un mal absoluto. En algunos casos, como en éste, o en la que mencioné del Beato Pablo VI, es claro", continuó.
El 79-años de edad, se refería a la decisión de un precursor para autorizar monjas en riesgo de violación en África para usar anticonceptivos.
dijeron el jueves científicos que los vínculos entre el virus Zika y microcefalia se han reforzado por un estudio que incluyó a las mujeres embarazadas en Brasil.
La investigación confirmó la presencia del virus Zika en el líquido amniótico de las dos mujeres que habían tenido síntomas similares a Zika durante sus embarazos.
expertos brasileños dicen que esto sugiere que el virus puede infectar al feto.
Pero los expertos de la Organización Mundial de la Salud advierten que el vínculo no está probada y esperan a conocer más información en los próximos semanas.
Análisis - Caroline Wyatt, corresponsal de asuntos religiosos
los comentarios del Papa sobre la prevención del embarazo en las zonas donde el virus Zika es frecuente son un momento sumamente significativo.
Mientras que él no aprueba específicamente la anticoncepción artificial, que está en contra de la doctrina católica romana, que parece señalar una apertura inesperada a la idea de si se utiliza con el fin de prevenir la infección adicional.
Cuando se le preguntó directamente si la Iglesia lo consideraría admisible utilizar anticonceptivos con el fin de evitar la transmisión de Zika, Francisco dijo que, en algunos casos, el "mal menor" se podrían aplicar y habló del ejemplo del Beato Pablo VI, un Papa en el principios de 1960 que permitieron monjas en África a utilizar métodos anticonceptivos con el fin de evitar que los niños que conciben de violación.
Eso deja la puerta abierta a las familias católicas en las zonas afectadas para seguir su propia conciencia en la materia.
Sin embargo, el Papa hizo muy claro que el aborto sigue siendo "un crimen, un mal absoluto", mientras que el control de la natalidad no era un mal "absoluta".
Las Naciones Unidas y las organizaciones de ayuda han instado a los países afectados por el virus para asegurar que las mujeres tengan acceso a los métodos anticonceptivos para reducir el riesgo de infección y el derecho al aborto si deciden interrumpir un embarazo.
Muchos países de América Latina prohíben el aborto o lo permiten sólo si la vida de la madre está en peligro.
Después de decir inicialmente poco sobre el brote, los líderes católicos de la región habían comenzado recientemente a hacer valer la oposición de la Iglesia a lo que denomina "artificial" control de la natalidad y el aborto.
En lugar de utilizar el condón o la píldora anticonceptiva, los funcionarios de la Iglesia han estado recomendando la abstinencia o lo que ellos llaman la planificación familiar natural - la programación de las relaciones sexuales de los períodos menos fértiles del ciclo menstrual de la mujer.
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